Este hombre olvidó su desayuno, pero… ¡Su esposa lo salva de manera increíble!

Dentro de la sociedad moderna de este siglo el tiempo tiene un rol fundamental en todos los aspectos y es que de alguna u otra forma en él recae el secreto para generar dinero. El tiempo es valioso.

Secundario a lo anterior no debería sorprendernos que nuestros jefes hagan hasta lo indecible para aprovechar cada segundo que tenemos en función de sus beneficios.

Quien trabaja más gana más y por ende es preciso que las prioridades sean ajustadas como es debido de manera que obtengas eso que tanto deseas. Mantén tu mente enfocada.

Esta noticia se ha hecho viral en el transcurso de la semana y en parte nos parece algo aceptable porque a simple vista se nota que es una información original sobre un hecho más que interesante. Por favor presta mucha atención al siguiente relato que seguro te sorprenderá.

Ellos se casaron hace más de 5 años y desde el momento en que se conocieron en la universidad sabían que eran el uno para el otro. Él pertenecía al equipo de fútbol mientras que ella además de ser una excelente estudiante se desempeñaba como miembro del equipo de tiro con arco.

Se trataba de jóvenes talentosos quienes debían hacer un espacio en sus ocupadas agendas para poder coincidir durante algún almuerzo dentro de la universidad, aunque los fines de semana las cosas salían con más facilidad. Lo siguiente iba a ser impresionante; era el sueño de los dos.

Por fin se casaron y al cabo de unos pocos meses ya ella estaba esperando el primer hijo de la familia. La verdad es que la felicidad se les podía ver en la cara. La cuestión es que el hombre tuvo que conseguir un trabajo de tiempo completo para poder asumir los gastos.

Ahora este sujeto tenía que madrugar para llegar a tiempo a su nuevo trabajo. Afortunadamente tenía un auto. En una ocasión salió tan rápido que olvidó su desayuno. El apartamento estaba en el piso 6 seis así que subir no iba a ser una opción. Lo que pasó después tiene a todos con los ojos saltones.

Su esposa le arrojó el desayuno desde lo alto y el mismo cayó justo en el asiento del copiloto, entró a través de la abertura que tiene el coche en el techo. Nos queda claro que esta señora tiene bastante puntería. De verdad que esos años en la universidad valieron la pena. ¡Bien por ella!